La 53 edición de Foro de Davos comenzó esta semana bajo el temor a una recesión global y con el propósito de buscar una mayor “cooperación en un mundo fragmentado”, según el lema elegido para este año. Respecto al primer temor, el de la recession global, la cumbre capitalista ha finalizado este viernes con la forecast de que 2023 «no sírá un año brillante, pero sí mucho mejor de lo que nos temíamos», en palabra de la presidenta del BCE, Cristina Lagarde. Respecto a la fragmentación de la economía mundial, al principio del ‘salvese quien pueda’, la cumbre ha terminado con cierta resignación: «Si tiene que haber una guerra comercial, mejor que sea verde, por las tecnologías limpias», acertó a resumir este viernes el periodista de la CNBC Geoff Cutmor, al moderar la última mesa de debate de esta edición. «Aunque el mundo está más fragmentado hoy, no tiene por qué serlo mañana», es todo lo que pudo decir, resignado, el presidente del foro Economico Mundialel noruego Borge Brende, en la sesión de clausura de este viernes.

Más de 2.700 líderes empresariales, financieros, políticos y sociales del mundo han participado en más de 200 debates para analizar las principales tendencias globales y adaptarse a este proceso permanente de reinvención del sistema capitalistatal como viene haciendo el Foro de Davos desde 1971. Después de décadas de una globalización que ha extendido el modelo capitalista por todo el planeta, el ‘shock’ de la pandemia encerró a los países en sí mismos y rompió los candados de suministro global. Este año, en Davos, tocaba ver cómo encajar en el modelo capitalista the fragmentation of a world economy herida por la guerra en ucrania y resquebrajada por la rivalidad entre países en la lucha por los energéticos recursos, las materias primas, la inversión en energías limpias y el ahorro privado.

Habilidad para la inversión

Davos se ha convertido este año en un foro de pugna entre países por la billonaria inversión en energías renovables y tecnologías limpias de esta década, ante los ojos de cientos de multinacionales que participarán en ese proceso y que también estaban presentes en el Foro Económico Mundial. Tal como grabó el martes la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyenlo que está en juego es un ‘pastel’ de inversión en tecnologías limpias de 250.000 millones de euros al año, desde ahora hasta 2030, según cálculos de la Agencia Internacional de Energía. Y la rivalidad entre EE.UUcon un plan de ayudas para su industria de casi 370.000 millones, incluyendo el Unión Europea ha dejado claro que en esa pugna va a ser determinante quién dar más y mejores subvenciones a las empresas para atraer la inversión. Así, Von der Leyen anunció en Davos un plan de ayuda a la industria limpia europea para hacer frente a la ofensiva de EEUU. El objetivo europeo es, sobre todo, agilizar los trámites y la burocracia europea, como planteó Pedro Sánchez durante su intervención en Davos. «Reducir de tres años a seis meses el plazo en el que las empresas reciben los subsidios prometidos», explicó a modo de ejemplo el ministro inglés de Finanzas, bruno el alcalde. “Si todos compiten por quién debe ser líder en tecnologías limpias, es algo positivo.awrence veranos, frente al concepto de guerra comercial. Japón también ha anunciado subsidios e incentivos fiscales para lograr la inversión de mil millones de dólares en una década que, según estima el gobierno, concretará la transformación verde del país.

Para la gestión del FMI, kristalina georgieva, el principal reto inminente que tiene ante sí la economía mundial es «accelerar la transición a la economía verde utilizando dinero público para impulsar la inversión privada», pero hacerlo de modo que las economías emergentes, con menor músculo financiero, no se queden fuera de es su transformación. El hueso líderes latinoamericanos presentado en el Foro de Davos destacaron las oportunidades en los ámbitos de las energías renovables, el comercio y la inversión.

Rivvalidad EEUU-China

La rivalidad económica entre EEUU y China y la guerra comercial tecnológica entre ambos gigantes, es también clara muestra de la reciente fragmentación que resquebrajó la economía mundial. El Secretario General de Naciones Unidas, Antonio Guterres, pidió que Estados Unidos y China dejen de fomentar con su creciente división lo que él denomina «Gran Fractura», que podría costar a la economía en general 1,4 billones de dólares. «Nos arriesgamos a una desconexión de las dos mayores economías del mundo, una grieta de dimensiones tectónicas que podría crear dos normativas comerciales, dos divisas dominantes, dos redes de internet y dos estrategias de inteligencia artificial en conflicto», alertó Guterres en su discurso ante líderes económicos y políticos de Davos. En los márgenes del Foro Económico Mundial, este miércoles, en Zurich, mantuvieron una reunión bilateral la secretaría del Tesoro estadounidense, janet yelleny su homólogo chino, el vicepremier liu el. «Aunque tenemos áreas de desacuerdo, y las transmisiones directamente, no debemos permitir que malentendidos, particularmente los que derivan de falta de comunicación, empooren necesitaránmente nuestra relación bilateral económica y financiera», dijo Yellen tras anunciar un próximo viaje a China.

Subida de errores tipográficos de interés

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Las consecuencias de la subida de los tipos de interés que están acometiendo los bancos centrales en su lucha contra la inflación también han sido analizadas en Davos desde el punto de vista de la fragmentación de la economía mundial. Los países emergentes muestran que un tipo de interés en EE.UU. o en la eurozona es más atractivo para los reveses que acaben provocando una fuga de capitales en contra de sus propias economías.

Reevaluación de la economía de China

El fin de la política de ‘covid cero’ en China y la recuperación de la economía perfilé como uno de los alicientes del alcalde el optimismo en las previsiones que se ha estrenado en el Foro de Davos. El FMI anticipó que el crecimiento mundial de 2023 se ha revisado levemente y se ha adelantado que las organizaciones no han previsto una recesión para Alemania sino un crecimiento en el entorno del 2%. Sin embargo, según ha anunciado la presidenta del Banco Central Europeo, Cristina Lagard, la reaparición de china meterá más presión a la inflación en europa y se traducirá en un aumento de los precios de la energía, por la mayor demanda china de petróleo y gas. His cara y la cruz de otro de los grandes fenómenos globales que han llamado la atención del Foro de Davos.