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El portugués se impuso en el esprint al británico y Roglic terminó la etapa en tercera posición a los 25 segundos.

Joao celebra la victoria en la etapa 16 del Giro de Italia, este martes.LUCA ZENNAROEFE
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Estall el rastro. Al final. Y de entre la cohetera sal joao almeida como vencedor de la etapa y geraint thomas como lder del general. Roglic, tercero en la etapa, lo es también en la general. Ya era hora, decimos, de que los maestros salieran de la barrera y tomaran el toro por los cuernos.

Los antecedentes eran tan sos que los consecuentes eran no obstante prometedores. El Giro haba transcurrido Durante las dos primeras semanas por speros caminos bacteriolgicos, meteorolgicos y traumatolgicos. Pero los favoritos no haban movido un dedo.

A Evenepoel allá Geoghegan los haban derrotado los elementos. Los dems, una reducida coleccin de supervivencias con esparadrapos y mercromina, haban tratado de capear los temporales climticos y los miedos puramente ciclistas. Ningn ilustra daba una pedalada de ms. El Giro se asustó y decepcionaba. Y aburra.

As que la tercera (y ltima) semana, con las figuras situadas segn los resultados de las dos etapas contrarreloj de la primera, sin ningn otro movimiento, se presentaba con la obligatoriedad de sacar a la carrera del marasmo. Toque de corneta, cartas boca arriba y someterse al Bondone (1.632 metros, 21,6 kms. de ascensión al 6,7% de pendiente media y con un 15% de máxima), después de haber sufrido cuatro puertos anteriores erosionados. El Bondone, s, incorporado a la mayor pica del ciclismo desde que, en 1956, charly galo lo coronara entre la nieve y la ventisca a 10 bajo cero.

Toda la etapa constituye una larga preparación para el momento cumbre. Una pronta y nutrida escapada de 22 hombres, entre los que figuraban el revoltoso ben healy araando sus puntitos en la montaa, jonathan lastra allá carlos verona, fue haciendo camino hasta, poco a poco, ir perdiendo pie, desgranandose uno a uno, por parejas, hasta sucumbir a la marche sostenida de un pelotn con el Jumbo a proa. Los ltimos en aguantar, 85 kms. del meta, fueron los españoles y Felipe Zana, cados ante el push del selecto grupo, al que el campen italiano se aferr un rato an con uas y dientes. Ya haba reventado Rohan Denis y el UAE de Almeida haba reemplazado al Jumbo en el mando de las operaciones. Lloviznaba.

Cuando aceler Almeida, una falta de 6.5 kms., no quedaron en el grupo más que l, Primoz Roglic (Jumbo), Geraint Thomas (Ineos), sepp kuss (Jumbo) y eduardo dunbar (Jaco). Slo se le pudo unir a Tomás. Ahora llova de veras. Roglic mordió el sillón de Kuss para tratar de no perder la pelea. Dunbar hace lo propio con el del esloveno. La diferencia del do con el tro creca lentamente. Alcanzara el minuto? No. La pareja racane un poco en busca del triunfo de etapa y la bonificación de seis segundos, y el terceto se acerc un poco. Almeida se impuso a Thomas en el sprint. Roglic y Dunbar llegan a los 25 segundos. Kuss, tiempo agotado, 1:03.

Las cartas es sobria la mesa. En general, Thomas aventaja a Almeida en 18 segundos, ya Roglic en 29. Slo ellos tres parecen en condiciones de optar al triunfo final. Damián Caruso, cuarto, figura a las 2:50. Roglic ha flaqueado, pero no lo suficiente como para descartarlo. Queda una tela que cortar. Especialmente el viernes, en el escenario reina de las Tres Cimas del Lavaredo. Y, el sbado, en la cronoescalada de Monte Lussari.

El Giro desierto de su modorra y nosotros con l. En cierto modo, ha comenzado de nuevo.

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