Los países del Mar del Norte aspiran a convertir las costas en la ‘mayor central eléctrica verde’ de Europa | Internacional

La guerra de Ucrania había dado un fuerte impulso a la autonomía energética de Europa, obligada a reducir sustancialmente en menos de 12 meses la dependencia de terceros países que, como Rusia, su capacidad para convertir la energía en arma de guerra. Las renovables estan teniendo un papel clave. Un año después de que un puñado de pays lanzaran denominado «coalición del mar del Norte» como respuesta a la amenaza rusa, ya son siete países de la Unión Europea, junto con Reino Unido y Noruega, los que se han comprometido este lunes en el la ciudad costera belga de ostende ha convertido las aguas gélidas que bañan el norte de europa en la “mayor central eléctrica verde” del continente. Para ello, dañarán la cifra de parques eólicos marinos u cerca de la costacon lo que buscan incrementar su capacidad a hasta 300 gigavatios (GW) anuales en 2050. Es decir, electricidad limpia para 300 millones de hogares europeos.

«Queremos una Europa más verde, energéticamente independiente y que pueda crecer de manera sostenible», ha resumido el anfitrión de la segunda cumbre del mar del norte, el primer ministro belga Alexander de Croo, flanqueado por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, así como por el presidente francés, Emmanuel Macron, y el canciller alemán, Olaf Scholz. En una muestra de la importancia que le dan a la iniciativa, también han viajado a Ostende los primeros ministros de Dinamarca, Países Bajos, Noruega, Irlanda y Luxemburgo, qu’a pesar de no tener salida al mar es clave en la industria eólica. Rishi Sunak fue el gran ausente de la cita, aunque el primero british construyó el domingo junto con sus homologos europeos a tribuna in el diario Política reafirmando su compromiso para “construir todo un sistema eléctrico en el mar del Norte basado en energías renovables mediante proyectos de cooperación”.

Para ello, los nueve miembros de la coalición, que suman 175.000 kilómetros de costa, multiplican en los próximos años sus parques eólicos marinos de una “coordinada” que acelerará los tiempos y asegurará las cadenas de aprovisionamiento. Asimismo, ampliar y mejorar la interconectividad de los suministros de energía eléctrica. Se trata, ha señalado De Croo, de «pasar de las declaraciones a la acción», lo que implica «estandarizar e industrializar» el sector. La industria eólica está muy marcada por la innovación y así debe seguir siendo, señalan los mandatarios. «El mayor defio de hoy es accelerar la construcción» de los parques eólicos marinos, y «para ello hay que estandarizar las tecnologías, la producción, la seguridad de las instalaciones y hasta el modelo de financiación, y luego sincronizarnos», ha subrayado el belga Ello permitirá además reforzar la autonomía estratégica europea, ha incidido Macron, que ha mostrado confiado en superar los recelos de sectores como el pesquero. «El desafío es identificar zonas compatibles con elementos de biodiversidad, actividades comerciales y pescadores», ha indicado.

Segun una declaración conjunta, la finalidad de la reunión es aumentar la capacidad, una última década, hasta los 120 GW de energía de los citados parques eólicos, unas cuatro veces más que los actuales combinados. Una meta ambiciosa de que lo será aún más en 2050, cuando se afirma que las plataformas eólicas marítimas llegarán a tener «al menos» 300 GW.

Sus unas cifras apabullantes si se tiene en cuenta que, en 2022, los nueve países participan apenas sumaron 30 GW con sus parques eólicos. Pero factibles, aseguran los mandatarios. Según ha afirmado este lunes el primer ministro noruego, Jonas Gahr Store, su país, qu’actumente genera 0,06 GW en tres parques eólicos marinos, tiene “la ambición de llegar a 30 GW de energía renovable para 2040″. Francia, obtuvo dos parques marinos sumaban el año pasado 0,5 GW, que aumentarán su capacidad a 6,8 GW en 2030 y hasta 40 en 2050. Energías renovables, mucho por delante de la solar y la eólica terrestre”, confía el Elíseo.

La coalición del mar del Norte también esperará que estos objetos contribuyan a la “producción a gran escala, marítima y terrestre, de hidrógeno renovable”. En este sentido, Alemania, Dinamarca, Países Bajos y Reino Unido comparan objetivos de una capacidad de producción combinada de 30 GW para 2030, agregó la declaración. “El hidrógeno renovable puede ser un punto de inflexión para Europa, nuestras industrias y nuestra economía, y la región del mar del Norte tiene la capacidad de producción de cantidades de ingentes de hidrógeno verde ser una vía importante de importación”, ha celebrado Von der Leyen.

Más seguridad en torno una infraestructura crítica

Los nueve países de la coalición también trabajarán de forma conjunta para garantizar la seguridad de sus plataformas y redes eléctricas, un fundamental sobre todo desde que el objetivo de sabotaje en septiembre pasado de los gasoductos Nord Stream pusiera en evidencia lo expuesto a amenazas que están infraestructuras critiques of Europea. Una amenaza que ha resurgido tras la investigación de varios medios nórdicos difundida la semana pasada acerca de que Rusia estarían barcos utilizando espías camuflados como pescadores o navíos de investigación para identificar posibles objetos en el mar del Norte, como parques eólicos o cables submarinos.

Bruselas está siguiendo todas estas advertencias «muy de cerca», ha asegurado Von der Leyen. “Sabemos que nuestra infraestructura critica está bajo amenaza, por eso hemos presionado nuestra preparación, la respuesta y la cooperación entre Estados”, ha insistido en Ostende, donde ha recordado que los expertos de la UE y de la NATO están trabajando en un programa de “resiliencia coordinada” de este tipo de infraestructura que se presentará en el primer semestre de la Alianza Atlántica, en julio.

La industria eólica ha recibido los compromisos de Ostende con una mezcla de satisfacción y de escepticismo. Porque más allá de las palabras, han indicado en su propia declaración de cara a la cumbre belga más de 100 empresas del sector eólico, hacen falta hechos y, sobre todo, financiación, algo sospech ausenteosamente en las declaraciones de los mandatarios.

«Nuestra industria no es lo suficientemente grande para cumplir los compromisos de los nueve gobiernos y afrontar la creciente demanda de electricidad e hidrógeno renovables», advierte el sector. Actualmente, este puede incrementar su capacidad en 7 GW anuales, muy lejos, recuerdan, de los 20 GW que serán necesarios en la segunda mitad de esta década para acumular los ambiciosos objetivos fijados en Ostende. “Podemos hacerlo”, aseguran, pero para ello “Europa sostiene que duplicar sus anuales en redes y canalizar 9.000 millones de euros de inversiones en la modernización y expansión de su infraestructura portuaria hasta 2030″. También debe resolver los «cuellos de botella» en la cadena de suministro y, al mismo tiempo, incentivar el trabajo en el sector, que tiene una aguda falta de mano de obra: actualmente cuenta con 80,000 trabajadores, que debería aumentar a 250,000 a finales de la década. «Dar pasos que aseguren la viabilidad financiera de la industria ayudarán a hacerla más atractiva», confía la industria.

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