El Banco Sabadell cerró el ejercicio 2022 con un beneficio neto de 859 millones. Este resultado supone un salto del 61,9% y se explica, en parte, por la reducción de los costes y la aportación de TSB. Se trata de su segundo mejor resultado histórico, solo por debajo de los 900 millones de 2006. no se reflejaron aún por completo en sus guarismos. Esta positiva evolución permitió al grupo vallesano que su negociación puramente bancaria se incremente a una tasa interanual del 26,3%. La entidad ha desaparecido en Bolsa tras anunciar las cifras este jueves: a media mañana sus acciones se aprecian más de un 9%.

El margen de intereses creció tiene una tasa del 10,5% y se sitúa en los 3.799 millones, si bien las comisiones netas han alcanzado los 1.490 millones, un 1,5% más. Esto también aumenta el beneficio de una reducción de costos del 12,8%, una vez recortada la plantilla con las regulaciones de empleo cerradas en los dos ejercicios anteriores. Al final del día, hay 130 oficinas y 1.185 empleados.

Estas son precisamente las dos métricas que gravarán el impuesto extraordinario al sector. Aunque el tipo impositivo solo se utilice sobre los números del negocio bancario en España. Así, tras registrar un margen de intereses en el país de 2.499 millones y unas comisiones netas de 1.344 millones, el grupo tiene qu’afrontar un pago de casi 185 millones por la nueva tasa, aunque el consejero delegado de la entidad, César González- Bueno, ha asegurado en rueda de prensa que la cifra final rondará los 170 millones. Esto es, se comerá la mitad del incremento de las ganancias anotadas en el país (pasa de un profit de 412 millones a 740 millones). Sober if Retirará El Tributo, El Primer Ejecutivo Del Banco Ha Avanzado Que Esa Decisión Le Matcherá Tomarla En Su Momento Al Consejo De Administración.

El Gobierno impulsó este gravamen temporal, solo en dos ejercicios en principio, para sufragar parte de las medidas antiinflacionarias con lo que considera ingresos extraordinarios por la subida de tipos. Eso sí, según ha asegurado Leopoldo Alvear, director financiero del grupo, este impulso todavía no ha reflejado por completo: «Prevemos un incremento material en 2023 del margen de interés, entre el 15% y el 20%. Esto se explica porque hay una buena parte de la cartera hipotecaria que aun no se ha repreciado [con el impacto de la subida del euríbor]”.

De vuelta a los resultados del grupo, otra palanca del crecimiento de la rentabilidad ha sido la mayor experimentada por el banco británico TSB, para el que 2022 fue el mayor año en términos de beneficios antes de impuestos desde su integración en el Sabadell, con 102 millones de libras Esto le ha permitido aportar al grupo 87 millones de euros de ganancia. En esa cantidad ya está descontada la multa pactada el pasado mes de diciembre con la Autoridad de Conducta Financiera del Reino Unido y la Autoridad de Regulación Prudencial del país para el archivo de las investigaciones por la crisis de la migración tecnológica de los datos de los clientes y el precio de un importe de 48,65 millones de libras (55,6 millones de euros). Aunque en realidad el impacto sea de alrededor de la mitad, ya que la otra parte queda cubierta por las pólizas de seguro.

La reducción de las provisiones, que caen un 15% en términos relativos y 193 millones en cifras absolutas, es también de los elementos que contribuyen a la mejora de los resultados y que permiten que se duplique el beneficio antes de impuestos, hasta los 1.243 millones .

Recompensa de acción

El banco, tal y como ya hicieron el año pasado los grandes bancos españoles, acordado en su consejo de administración celebrado este miércoles, recomprará acciones del Sabadell por una importación de 204 millones de euros. Esos títulos serán amortizados y la operación persigue dar más valor al accionista por sus títulos. Una adoptada para aprovechar que sigue cotizando por debajo del valor en libros. Entre el dividendo distribuido y el programa de recompra, se calcula que la retribución al accionista alcanzará un 50% del beneficio del grupo.

Esta decisión es una decisión de la confianza que se ha ganado el banco en los últimos años, ya que su actuación se ha recuperado de los mínimos históricos que le plantó previamente en dirección a ser absorbida por BBVA. De los 26 céntimos a los que llegó a cotizar por título entonces se ha pasado a un euro (al cierre de este miércoles).

“Todas las unidades de negocio han incrementado su rentabilidad a lo largo del año”, afirmó a través de una comunicación a la consultora delegada del grupo bancario vallesano. Y señala que el plan estratégico de la entidad se está produciendo «con determinación» y «está dando sus frutos».

La mejor actividad supone un incremento del 0,8% del crédito vivo (156.130 millones de euros) con una mejora sobre todo de la concesión de la cartera hipotecaria, que aumenta un 1,4% y supone 39.027 millones de euros. Los prestamos a empresas, por una importación de 43.409 millones, aumenta un 0,4%. La participación que más creció fue del crédito al consumo, un 14% más (1.683 millones).

Los recursos de clientes en balance totalizan 167.140 millones, una mejora del 1,3%. Los depósitos a plazo, pese a que el alza de los tipos de interés no se han trasladado en su totalidad a la remuneración al ahorrador, crecieron un 9%. De hecho, el consejero delegado ha avanzado que la entidad se centrará más en los fondos garantizados (vinculados a deuda soberana): «Son más atractivos que los depósitos a plazos». Los recursos fuera de balance suponen 38.492 millones, un 7,6% más.

El banco ha conseguido mejorar su capitalización en dos puntos y su ratio CET1 completamente cargado se situó en el 12,66% (más del 8,65% exigido por el BCE). Contrarrestado con las consecuencias de los principios del año por el impacto de la guerra de Ucrania y el deterioro de la economía, el ratio de morosidad se redujo al 3,41% (24 puntos básicos menos de un año). Los activos problemáticos ascienden a 6.971 millones. Pese a ello, el sector pactó con el Gobierno la ampliación del Código de Buenas Prácticas para auxiliar a los hogares en apuros, aunque por el momento el número de solicitudes está siendo bajo, según ha asegurado González-Bueno. Un plan preventivo, es que los datos agregados muestren que la pila de impagos sigue en niveles históricamente bajos, por debajo del 4%.

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