¿Quién se atrevía a decir que las feministas «romper el ambiente por la noche» ? Contrariamente a un compromiso triste o impregnado de ira, cultivan, cantando, una militancia gozosa y ultracontagiosa. Se llaman Les Chianteuses en París, Les Branl’heureuses en Lyon, Les Kagolphoniques en Marsella, Les Punks à chatte en Nantes, Les Chauffe Marcelle en Lille… Todos ellos hacen vibrar sus cuerdas vocales para exigir a una sola voz el fin de el patriarcado

en el 12mi distrito de París, el coro Our Revolted Lips (NLR para amigos) se reúne cada dos domingos para ensayar en la Zero Waste House. “Cuando te vuelves feminista, te pones unas gafas que no te puedes quitar después. La forma en que percibes el mundo a veces te enfada mucho…, fíjate en Lucile Emeriau, 29 años, cantante soprano, gestora de proyectos de igualdad de género en un ayuntamiento y máster en estudios de género. El coro ofrece un espacio donde respirar, recargar energías y vivir mucha alegría. »

esta alegría es en gran parte palpable en este domingo de primavera. Nos tomamos en brazos, nos besamos, intercambiamos masajes… Los participantes se unen para formar un coro, o al revés, depende. La gran mayoría de ellos tienen menos de 30 años y están experimentando por primera vez con un colectivo de “mezcla elegida”, por lo tanto, sin hombres cisgénero. Allí se aceptan todas las mujeres, independientemente de su identidad de género u orientación sexual, así como personas transgénero y no binarias.

«Herramienta de resistencia»

«Muy diversos, estos coros pueden mezclar todas las edades, pero hay una clara diferencia generacional cuando se trata de la cuestión de la diversidad.observa Anne Peyret, quien en 2022 defendió una disertación de investigación sobre coros feministas en la Ecole des Hautes Etudes en Sciences Sociales. Los grupos más jóvenes optan más por grupos de un solo sexo. Entre otras cosas porque después de Mayo-68 muchos activistas decían que también necesitaban hombres en su lucha, de ahí un afán más “universalista” por parte de los mayores. » Algunos coros también afirman ser más femeninos que feministas, mientras que otros se consideran LGBTQIA+ o afrofeministas.

Si es imposible hacer un inventario preciso de los coros feministas en Francia, Anne Peyret señala una » explosión « del fenómeno a partir de 2019, tanto en las grandes ciudades como en el campo, con un pico aún más fuerte a partir de la década de 2020. En un contexto de reanudación y renovación de las luchas feministas, tras el asunto Weinstein en 2017 y el movimiento #metoo que le siguió. Según sus propios integrantes, el surgimiento de estos coros corresponde así al desarrollo de una nueva forma de militar y de involucrarse.

Te queda el 76,33% de este artículo por leer. Lo siguiente es solo para suscriptores.